Anteriormente hablamos sobre cómo dar el primer paso como emprendedor y cómo el crowdfunding puede ser una alternativa eficaz para financiar el arranque de un proyecto. Hoy hablaremos de cuando el proyecto se encuentra ya en marcha.
Para un emprendedor, identificar el momento adecuado para crecer es uno de los desafíos más grandes que encuentra. Y para lograrlo, la financiación es clave. Este reto puede presentarse también como la falta de opciones que aporten estabilidad a la liquidez de la empresa u otras formas. Lo ideal sería financiar esta etapa con beneficios acumulados tras largos períodos de trabajo, pero no siempre son suficientes o no llegan a tiempo.
Aunque existen programas públicos y subvenciones, así como la red financiera tradicional bancaria, ambos caminos suelen estar llenos de requisitos, plazos largos, avales y garantías. Por eso, contar con el apoyo de una consultoría o gestor especializado marca la diferencia. Pero la espera y la complejidad pueden evitar una oportunidad de crecimiento.
Aquí es donde las llamadas fuentes alternativas de financiación toman el protagonismo, disponibles para cualquier pyme. Estas son una gran opción para arrancar nuevos proyectos, pero también cuando el negocio ya está en marcha y se busca una vía rápida y flexible para reforzar la liquidez o ampliar el proyecto.
Las plataformas fintech y de crowdlending ofrecen productos similares a los de la banca tradicional, pero con procesos mucho más ágiles. Estas empresas conectan inversores privados de todo el mundo con pymes que necesitan financiación. Ofrecen soluciones como préstamos, factoring o confirming, con condiciones competitivas y trámites mucho más sencillos.
Mientras un banco puede tardar semanas en resolver una solicitud, muchas fintech responden en pocos días, incluso horas. Plataformas como ECrowd, Colectual u October permiten solicitar importes que van desde los 3.000 hasta los 300.000 euros, con plazos e intereses que compiten directamente con los de la banca, y con una gestión mucho más digital y transparente. Incluso si tu necesidad es puntual, como pagar a proveedores con mayor flexibilidad, estas plataformas ofrecen soluciones para cubrir pagos de hasta 3.000 euros, con plazos de devolución de hasta 180 días.
Del mismo modo que un emprendedor es capaz de ver dónde hay una necesidad que puede cubrir con su producto o servicio, también puede ver que existen nuevas formas de financiar su crecimiento fuera de la banca tradicional. La clave está en informarse, comparar opciones y no cerrar la puerta a herramientas nuevas, que llegaron para ayudar a las pymes a seguir avanzando.
Si necesitas ayuda en este ámbito, puedes solicitar el asesoramiento gratuito que ofrecemos desde la Oficina Económica de Galicia. Lo único que tienes que hacer es rellenar un formulario en línea y una persona experta se pondrá en contacto contigo.